El artista y diseñador español Marc Grañén, vio un potencial en las superficies no utilizadas de los autobuses y se imaginó una manera de utilizarlas para añadir un toque de verde a las calles de la ciudad.
Su concepto, que él llama Phyto Kinetic, se centra en los techos verdes y pequeños jardines en la parte superior de los autobuses públicos, un cambio simple que según él, puede embellecer las ciudades y ayudar a resolver los problemas de contaminación del aire.
La idea
Después de ver una foto aérea de una ciudad, Grañén se dio cuenta de las decenas de autobuses aparcados en las calles y se preguntó si había una manera de reinventar sus superficies sin uso e inventar algo hermoso.
Tomó la idea de sus dos hijos, de 6 y 9 años, que de inmediato comenzaron a crear sus propias maquetas y bocetos de un bus con jardines en el techo. El entusiasmo de los jóvenes varones dio al artista la validación que necesitaba para seguir adelante con la idea.
“Mi proyecto existe gracias a mis hijos”, dice Grañén. “Trato de aprender de ellos todos los días.”
En menos de un año, Grañén creó un autobús y una pequeña furgoneta – cada uno con su propio ecosistema en miniatura que contiene plantas de todo tipo y pequeños animales salvajes como lagartijas, ranas e insectos.
Los beneficios
Según la investigación llevada a cabo por Grañén con la ayuda de ingenieros agrónomos y botánicos, las plantas en la azotea capturan 20 kilogramos de CO2 al año por cada metro cuadrado de techo. En un centro urbano grande, una flota completa de buses mejorados, podrían crear más de 100.000 metros cuadrados de espacio verde y con aire limpio, dice el artista.
Además, una cubierta verde agrega aislamiento térmico que ayuda a regular la temperatura de los autobuses en los días calurosos.
“El tercer beneficio y el más visual es el ejemplo ecológico”, dice Grañén, y agregó que estos jardín móviles, ofrecen una proximidad a la naturaleza que la mayoría de los habitantes de las ciudades rara vez tienen en sus viajes diarios al trabajo.
“Poco a poco estoy demostrando que esto es algo que realmente funciona”, dice. “Esto es algo que es muy hermoso, pero también práctico.”
Las especificaciones
El jardín esta hecho de un marco de acero inoxidable que ha sido impermeabilizado para evitar fugas. Para mantener todo en su lugar cuando el autobús para, Grañén diseñó un sistema de bandas perforadas de acero inoxidable y una cubierta de malla de alta resistencia que protege incluso contra los impactos más severos.
Grañén optó por espuma hidropónico como base de su pequeño ecosistema, la cual cuenta con una mejor retención de la humedad que el suelo estándar y pesa mucho menos.
El agua condensada, que normalmente extenderse a la calle a través de pequeños tubos que llevan fuera del bus, se desvía a través de un sistema de red bajo el jardín para regar las plantas.
La mayor parte de la superficie del jardín se compone de plantas sedum resistentes, que requieren muy poca agua y pueden soportar las temperaturas cálidas y frías. Además, Grañén dice que ha plantado flores, arbustos e incluso comestibles como la lechuga y las fresas.